Ostreicultura Ostras Chatelaillon Boucholerus Laurinda HudgensOstreicultura Ostras Chatelaillon Boucholerus Laurinda Hudgens
©Ostreicultura Ostras Chatelaillon Boucholerus Laurinda Hudgens

Guía de la ostra de Châtelaillon

Como aperitivo o para almorzar, nos encanta comerla a cualquier hora del día. Pero, ¿sabe cómo llegó la reina de la costa a la carta de su restaurante? Del mar al plato, le guiaremos paso a paso por el viaje de la ostra en Châtelaillon. ¡Siga la guía!

Etapa 1 - Captura

Los pequeños moluscos vuelven a la fábrica, donde se extraen con una máquina, se clasifican y se introducen en bolsas. A continuación, las bolsas se colocan en mesas en el mar para que las ostras puedan seguir creciendo a sus anchas. Agua y sol: ¡la dolce vita!

*Pssst, puedes ver las mesas y sus bolsillos en la playa de Boucholeurs con la marea baja. Merece la pena echar un vistazo.

Etapa 2 - Cría

1 – Quitar los bolsillos

Entonces, no, no las tires (te aconsejamos que corras deprisa si no), pero dales la vuelta con regularidad para favorecer el desarrollo de los moluscos y limitar la aparición de algas.

2 – Cambio de bolsillos

Al cabo de un rato, ¡se acaba el espacio! Las ostras se llevan de vuelta al establecimiento, se transfieren en cantidades más pequeñas a bolsas más grandes y se vuelven a colocar en las mesas. Mimadas y consentidas, las ostras de Châtelaillon no tienen nada de qué quejarse.

Descubra estas dos técnicas y muchas otras reservando su visita a los criaderos de ostras.

Etapa 3 - Perfeccionamiento

*¿Lo sabía?

Los tamaños, o calibres, de las ostras también están regulados por un acuerdo profesional. Van de 0 a 5 para las ostras huecas y de 000 a 6 para las planas. Cuanto menor es el número, mayor es el calibre.

Para saber más sobre las ostras de Châtelaillon, ¿por qué no visita una ostrería con Laurence? Estará encantada de enseñarle los fundamentos de su oficio.

Etapa 4 - Degustación

Caliente o fría, con un chorrito de limón o simplemente por su sabor yodado, ¡es hora de saborear la ostra de Châtelaillon! ¡Que aproveche!

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