La playa tiene una pendiente suave, sin olas ni olas. Se puede nadar y navegar con total seguridad.
En temporada, se colocan en la playa grandes mástiles coronados con animales para ayudar a los niños a orientarse. Un león, un panda, un elefante… Elige el tuyo y enséñaselo a los niños para que no se alejen demasiado de él.